¿De dónde proviene la autoridad de los guerreros espirituales?
Base Bíblica: Lucas 10:17-19
Introducción:
Curiosamente los primeros cristianos dependían enteramente de Cristo en el desarrollo de su ministerio; hoy, dependemos de los títulos y de la experiencia que se deriva de los libros. El problema radica en que el conocimiento intelectual no tiene poder contra el mundo de las tinieblas sino la autoridad que se deriva de nuestra dependencia del Señor Jesús. Él es quien nos asegura la victoria en la lucha contra Satanás y sus huestes.
I. Los guerreros espirituales obran en la autoridad de Cristo y no en la que confiere el hombre (Lucas 10:17-20)
1. El mover de Cristo en la vida de los guerreros espirituales les confiere poder y autoridad para librar las batallas
a. Expulsamos los demonios en el Nombre del Señor Jesús (Lucas 10:17; Cf. Hechos 16:16-18)
b. Ejercemos la autoridad de Cristo si permanecemos unidos a Él, porque enfrentamos un mundo de tinieblas bien organizado (Lucas 11:18, 19)
2. Cuando militamos como guerreros espirituales, enfrentamos los ataques de nuestro adversario espiritual (Lucas 11:18; Cf. Efesios 2:2; Juan 14:30)
“Después de la caída del hombre, Satanás comenzó su larga lucha contra la obra que Dios realiza a favor de la humanidad, lucha que aún continúa en nuestros días…” (Biblia Anotada de Estudio Scofield. Publicaciones Españolas. 1994. Nota a Apocalipsis 20:10. Pg. 1307)
3. Jesucristo mismo es quien nos confiere autoridad espiritual (Lucas 10:19)
a. Para enfrentar el mundo de las tinieblas
b. Para vencer sobre el mundo de las tinieblas
c. Para ser protegidos frente a los ataques del mundo de las tinieblas
II. Al Señor Jesucristo lo cuestionaronlos líderes religiosos de su época sobre la autoridad espiritual
1. El Señor Jesucristo dejó sentado que su autoridad espiritual no provenía de líderes religiosos (Marcos 11:27-33)
a. Los guerreros espirituales se someten a sus pastores y autoridades de la iglesia
b. Los guerreros espirituales son sensibles a la voz de Dios para librar las batallas
2. Como Jesús no ejercía autoridad conferida por los hombres sino la que proviene de Dios, los líderes religiosos de la época le ponían trampas (Marcos 12:13-17)
3. Jesús fue enfático en aclarar que Su autoridad venía del Padre (Mateo 28:18)
a. Nuestra autoridad se fundamenta en caminar de la mano del Señor Jesucristo (Juan 15:5)
b. La autoridad permanece en la medida en que permanecemos prendidos de la mano del Señor Jesús
III. El Señor Jesús nos dio autoridad espiritual para ayudar en la extensión del Reino de Dios
1. Como los primeros discípulos, los guerreros espirituales predican el Evangelio, ministran sanidad a los enfermos y liberación a los cautivos espirituales (Mateo 10:5-8)
“En mi experiencia, he encontrado demonios de duda e incredulidad y, aunque parezca mentira, están ligados frecuentemente a espíritus religiosos tales como de legalismo, de idolatría, de religiones falsas y masonería… La incredulidad realmente limita lo que Jesús quiere hacer…” (Doris Wagner. “Cómo ministrar liberación”. Editorial Peniel. Argentina. 2005. Pg. 23)
2. Damos la batalla contra el reino de las tinieblas gracias a la autoridad que nos dio el Señor Jesús (Marcos 6:7)
3. Como discípulos del Señor Jesús cumplimos la misión de destruir las obras del diablo (1 Juan 3: 8)
Conclusión:
Cada cristiano tiene un papel protagónico en la extensión del Reino de Dios, que debe asumir. No podemos eludir esa encomienda. No obstante, sabemos que es una tarea que enfrentará oposición del mundo de las tinieblas. Ante los ataques permanentes, de los que debemos ser conscientes, es necesario que estemos dispuestos a resistir el avance de Satanás y sus huestes. Lo hacemos en nuestra condición de guerreros espirituales, que caminan diariamente prendidos de la mano del Señor Jesús.
Publicado en: Sermones
Copia el siguente texto a tu muro de Facebook:
https://www.bosquejosparasermones.com/site/index.php/de-donde-proviene-la-autoridad-de-los-guerreros-espirituales/
Temas Relacionados:
Lecciones prácticas y sencillas para su crecimiento en intimidad con Dios.