Venza por la fe las enfermedades, la ruina y la muerte espiritual

Base Bíblica: Deuteronomio 30:8-16.

Introducción:

¿Ha meditado alguna vez en el hecho de que el propósito eterno de Dios es que seamos bendecidos a nivel de salud física y espiritual, al tiempo que seamos prosperados en el ámbito material?

Esos principios que son poderosos para nuestras vidas y las de cada integrante en nuestro hogar, están contenidos en las Escrituras. Los obtenemos por fe, cuando tenemos claro que el Señor Jesús en la cruz abolió toda maldición.

Avanzar en esa dirección es posible cuando renunciamos a las expresiones de ruina y derrota, y declaramos palabras de fe. Dios honra nuestra fe y nos lleva a un nuevo nivel.

I.- POR MEDIO DE LA FE VENCEMOS A NUESTRO ENEMIGO ESPIRITUAL.

1.- Satanás busca robarnos la fe:

• Si lo permitimos, levantamos una enorme barrera al mover de Dios.
• Si lo permitimos, caminaremos en derrota (Cf. Proverbios 4:24; 6:2; Job 3:25)
• No podemos creer las mentiras de satanás.
• Los ataques de satanás comienzan por los pensamientos.

2.- La fe nos permite vencer al mundo (1 Juan 5: 3, 4)

3.- Satanás busca minar nuestra fe, pero ya tenemos asegurada la victoria sobre él (Apocalipsis 12:11)

4.- Cuando nos movemos en fe, tenemos la certeza de que Dios nos escucha (1 Juan 5:14, 15)

II.- POR MEDIO DE LA FE VENCEMOS LA ENFERMEDAD, LA RUINA Y LA MUERTE ESPIRITUAL.

1.- Una forma de combatir los ataques de satanás es declarar palabras de fe (Proverbios 10:11; 10:31, 32)

2.- Cuando declaramos palabras de fe, Dios honra nuestra fe (Proverbios 10:21, 24)

3.- Cuando declaramos palabras de fe, proferimos bendiciones (Proverbios 11:11; 12:6)

• Las palabras de fe nos aseguran la provisión de Dios (Proverbios 12:14, 13:2)
• Las palabras de fe están ligadas a la sanidad (Proverbios 12:18)

4.- Cuando declaramos palabras de fe, reconocemos que Jesucristo en la cruz (Gálatas 3:13, 14):

• Nos hizo libres de toda maldición.
• Nos hizo herederos de las bendiciones de Abraham.

5.- De acuerdo con Deuteronomio 28-30, la maldición está representada por:

• La enfermedad.
• La pobreza.
• La muerte espiritual.

6.- El propósito de Dios es que seamos prosperados (3 Juan 2)

III.- POR MEDIO DE LA FE RECIBIMOS LA PROSPERIDAD DE DIOS

1.- Cuando declaramos palabras de fe, aún las riquezas de los injustos serán para nosotros (Proverbios 13:22)

2.- El propósito de Dios es que seamos prosperados (3 Juan 1, 2; Filipenses 4:19)

3.- El propósito de Dios es que nada ni nadie nos roben el destino de prosperidad (Salmos 1:1-3)

Conclusión:

Nuestra vida está llamada a experimentar cambio y crecimiento en todas las áreas. Esa transformación no es solamente física y espiritual. También está referida a llegar a nuevos niveles de fe.

Hasta tanto tengamos el pleno convencimiento de que el Dios en el que hemos creído es un Dios de poder, estaremos girando alrededor del mismo punto: enfrentando la derrota, las crisis, la pobreza y hasta la enfermedad.

Jamás pierda de vista el hecho de que Jesús al morir en la cruz, nos hizo heredero de las bendiciones. Si creemos en las promesas de Dios, podemos reclamar esas bendiciones que imprimirán una nueva dinámica a nuestra vida personal y familiar.